¿Por qué con la pérdida de audición se oye el sonido, pero no se entienden las palabras?
La pérdida de audición es un fenómeno más complejo de lo que parece a simple vista. Muchas personas que empiezan a experimentar problemas auditivos se enfrentan a una situación frustrante: oyen sonidos, pero no logran entender las palabras con claridad. ¿Por qué ocurre esto? Aquí explicaremos qué hay detrás de este problema, que afecta a millones de personas en todo el mundo.
LA DIFERENCIA ENTRE OIR Y ENTENDER
Es importante comprender que oír y entender no son lo mismo. Oír implica captar los sonidos a través del oído, mientras que entender se refiere a la capacidad del cerebro para procesar esos sonidos y darles significado. Cuando hay pérdida auditiva, especialmente en frecuencias específicas, puede ser más difícil comprender lo que se escucha, aunque los sonidos sigan estando presentes.
PÉRDIDA DE AUDICIÓN Y FRECUENCIAS
La mayoría de las pérdidas de audición están asociadas con la pérdida de sensibilidad a ciertos tonos o frecuencias. En particular, muchas personas pierden la capacidad de oír frecuencias más altas, que son cruciales para entender los sonidos del habla, como las consonantes «s», «t» o «f». Estas consonantes son las que dan claridad y forma a las palabras. Por ejemplo, al perder la capacidad de escuchar estas frecuencias, palabras como «pato» y «gato» pueden sonar prácticamente iguales, lo que lleva a la confusión.
DETERIORO DE LA DISCRIMINACIÓN DEL HABLA
Un aspecto importante de la pérdida auditiva es que afecta la capacidad del cerebro para discriminar o diferenciar entre sonidos similares. Aunque una persona pueda oír un sonido, si tiene pérdida auditiva, su cerebro puede tener dificultades para identificar y distinguir las palabras dentro de una conversación, especialmente en entornos ruidosos o cuando varias personas hablan al mismo tiempo. Esto genera una sensación de “oír, pero no entender”, una de las quejas más comunes entre las personas con pérdida auditiva.
LA IMPORTANCIA DE LA INTERVENCION TEMPRANA
Reconocer los primeros síntomas de la pérdida auditiva, como la dificultad para entender el habla, es fundamental para buscar ayuda a tiempo. Los audífonos modernos están diseñados no solo para amplificar los sonidos, sino también para mejorar la capacidad del cerebro de interpretar las palabras y filtrar el ruido de fondo. Cuanto antes se intervenga, mejor será la adaptación del cerebro a la tecnología de asistencia auditiva y mayor será la mejora en la comprensión del habla.
CONCLUSIÓN
Cuando se pierde la audición, no solo se trata de una cuestión de volumen. La pérdida de audición afecta la capacidad de entender el habla debido a la pérdida de sensibilidad a ciertas frecuencias, la dificultad para discriminar sonidos y la incapacidad para filtrar el ruido de fondo. Si has notado que escuchas los sonidos, pero no entiendes las palabras, puede ser un signo de pérdida auditiva y deberías considerar hacerte una evaluación auditiva en un centro especializado.
La comprensión del habla es clave para una comunicación eficaz, y con la tecnología y tratamientos adecuados, es posible recuperar gran parte de esa capacidad. ¡No dejes que la pérdida auditiva te impida disfrutar de las conversaciones diarias!
